Por Luisa García Pelatti

El número de propiedades reposeídas siguen en niveles bajos. En abril, se ejecutaron 167 viviendas, 322 menos que en el mismo mes del año pasado.

Las ejecuciones de vivienda, que había alcanzado un nivel récord de 5,751 en 2016, cayeron 20.6% en el 2017 hasta 4,568, según datos revisados de la Oficina del Comisionado de Instituciones Financieras (OCIF).

Las ejecuciones disminuyeron tras el paso del huracán María, como resultado de las moratorias de ejecuciones hipotecarias. Las moratorias se han ido venciendo y desaparecerán totalmente después del verano, cuando se anticipa un repunte en ejecuciones.

Por otro lado, el número de hipotecas en proceso de ejecución se redujo en enero (el último dato publicado) a 12,962, el nivel más bajo en, al menos, cinco años, lo que significa una reducción de 18.2% respecto al mismo mes del año anterior. Las hipotecas en proceso de ejecución han estado cayendo durante los últimos 21 meses.

En enero, había 7,439 hipotecas en proceso de quiebra, una cifra que se ha reducido 1.7% respecto al mes previo, está por debajo de las 8,258 hipotecas en proceso de quiebras de enero del año pasado y muy lejos de las más de 13,000 del 2013.

La tasa de morosidad en hipotecas había alcanzado el 31.91% en noviembre del año pasado y cayó hasta 22.84% en enero. Pero todavía es casi el doble de lo que era en enero de 2017 (12.73%).