Por Luisa García Pelatti

La tasa de desempleo se situó en enero de este año en 15.1% su nivel más bajo para un mes de enero desde 2009. Los datos, que corresponden a la nueva metodología ajustada estacionalmente del Bureau of Labor Statistics, muestran una lenta reducción de la tasa de desempleo, que alcanzó su nivel pico en mayo de 2010, cuando fue de 16.6%.

En enero bajó la tasa de desempleo, aumentó 2% el número de empleados y disminuyó 5% el número de empleados. Otro aspecto positivo es que por segundo mes consecutivo el grupo trabajador aumentó.

Los datos de empleo, como otras indicadores de actividad económica empiezan a mostrar mejoría tras seis años de depresión. Pero estos resultados difícilmente pueden presentarse como algo deseable porque en enero la tasa de participación laboral (la proporción de la población que está disponible para trabajar que realmente participa en el mercado de trabajo) siguió cayendo y ya está en 40.7%, su nivel más bajo en 29 años; y la tasa de empleo (qué proporción de la población que podría estar disponible para trabajar está efectivamente trabajando) disminuyó hasta 34.5%. Estos dos estadísticas son indicadores de que ha crecido el número de desalentados, los que después de mucho tiempo buscando trabajando si éxito, dejan de hacerlo.

Los datos muestran que en enero el número de personas empleadas aumentó de 1,074,000 en el 2011 a 1,096,000 en el 2012. Se trata del primer aumento desde que empezó la crisis económica, pero ahora hay menos personas empleadas que las que había hace 15 años.

El número de personas desempleadas se redujo de 205,000 en enero de 2011 a 195,000 este año, unas 10,000 desempleados menos. La tasa de desempleo es especialmente alte entre los jóvenes de 16 y 19 años (41%). La mitad de los chicos de esa edad están desempleados.

El grupo trabajador creció en enero por primera vez en cinco años hasta 1,291,000 personas, el nivel donde estaba en 1997.