Earns Pfizer

Por Universia Knowledge@Wharton

Pfizer Inc. obtuvo ingresos superiores a $12,400 millones en 2007 y 2008 con un solo medicamento: Lipitor. El superventas de Pfizer, que reduce los niveles de colesterol malo, representó más de una cuarta parte de los ingresos totales de la empresa en estos últimos dos años.

Pero los años dorados han terminado.

En 2010, los derechos de protección de patentes comenzaron a expirar en varios países, y la fuente de ingresos de Lipitor se desaceleró a medida que los productos sustitutos fueron ocupando su lugar en los estantes de las farmacias. Las ventas cayeron bruscamente después de que la patente de Estados Unidos expirara en 2011, sumando $3,900 millones en ingresos en 2012. El año pasado, Lipitor representó sólo el 4.2% del total de ventas de Pfizer, o $2,060 millones, lo que todavía hace de la marca una importante fuente de ingresos para los estándares normales.

Lo que a menudo pasa desapercibido es que Lipitor, el medicamento más vendido en la historia, llegó a Pfizer a través de la adquisición de Warner Lambert en 2000.

Mientras que los críticos señalan algunos errores en el proceso de fusiones y adquisiciones (F&A) (Pfizer compró cerca de 25 empresas, parcial o totalmente, en los últimos 15 años), Lipitor no fue el único gran éxito de la empresa que le llegó vía adquisición. Celebrex, por ejemplo, medicamento para el tratamiento de la artritis, que proporcionó a la compañía ingresos de más de $2,000 millones al año durante nueve años hasta que la patente expiró a finales del año pasado, se unió a la línea de productos de Pfizer después de la compra de Pharmacia en 2003.

Pfizer continúa añadiendo productos a su cartera de medicamentos mediante la adquisición de otras compañías. La compra de Hospira por $15,000 millones, finalizada en septiembre, impulsará el negocio de genéricos de Pfizer con una nueva clase de fármacos conocidos como biosimilares, que son básicamente copias de fármacos biológicos caros y complejos.

Sin embargo, la última combinación de Pfizer, una fusión de $160,000 millones con Allergan Plc, de Dublín, anunciada en noviembre pasado, no debería ser el origen de la siguiente droga multimillonaria. En lugar de ello, fortalecerá la cartera de medicamentos especializados de Pfizer y aumentará su presencia en el exterior, las dos fortalezas de Allergan, una empresa que está creciendo rápidamente.

Por supuesto, el principal factor detrás de la fusión es el de reducir la carga fiscal de Pfizer. Ella está estructurada como una adquisición de control de Allergan por parte de Pfizer, y la nueva empresa se llamará Pfizer. Cambiar la sede administrativa de la empresa a Irlanda, donde las tasas de impuestos corporativos son menores que en EE.UU., lo que contribuirá a la impopularidad de la compañía en Washington, pero hará que su tasa impositiva caiga hasta el 17% o 18% este año en comparación con el 26% del año pasado.

Adquisición de un fabricante de medicamentos especiales

El segundo factor detrás del acuerdo son los ingresos que Allergan, una empresa en rápido crecimiento, pone sobre la mesa. El mes pasado, los ingresos de la compañía fueron $10,870 millones en los primeros nueve meses del año, que se vieron impulsados por las adquisiciones, acercándose a los $13 millones reportados por su predecesor, Actavis, durante 2014. Mientras tanto, Pfizer dijo que tuvo una caída del 5% de los ingresos en el mismo período de enero a septiembre, lo que incluye el impacto de las divisas.

Se espera que las ventas mundiales de Pfizer aumenten aún más rápidamente el crecimiento de Allergan, especialmente fuera de EE.UU., que ahora es su principal mercado. “Lo positivo aquí es que Pfizer tiene una gran fuerza de ventas, siempre y cuando se tenga algo que vender”, dice Mark Pauly, profesor de gestión de la salud de Wharton.

“Pfizer tal vez esté tratando de mantenerse al margen de los medicamentos con un coste muy alto tan criticados por los políticos”, dijo Pauly. En cambio, es posible que la empresa dé prioridad a los medicamentos más centrados en la “calidad de vida”, como el Botox, de Allergan, utilizado principalmente en tratamientos cosméticos y Restasis, la línea de salud de la vista de Allergan.

Nuevas fuentes de ingresos se volverán efectivamente más importantes en los próximos años en que Lyrica, campeón de ventas de Pfizer, perderá su exclusividad en 2018; y Viagra, el tercero en el ranking de ventas de la compañía, se enfrenta a la competencia de genéricos en el año 2017.

Ian Read, presidente y consejero delegado de Pfizer, que continuará liderando la compañía, dijo que el acuerdo va a liberar miles de millones de dólares en efectivo de la compañía. Al menos parte de ese dinero, por no hablar de los beneficios que Pfizer ha acumulado en el extranjero y que quedarán disponibles, es muy posible que se invierta en el desarrollo de nuevos medicamentos.

Vamil Divan, analista de Credit Suisse, coloca en el tercer lugar en la lista de motivos de la fusión con Allergan la ampliación de la cartera de medicamentos en fase de prueba y desarrollo por parte de Pfizer. “La empresa es tan grande que necesita muchos productos para continuar creciendo y compensar la pérdida de las patentes”, dijo.

Sin embargo, poco después de tomar el mando de Pfizer en 2010, Read comenzó a cortar el presupuesto de I+D de Pfizer. El gasto se redujo en un 30%, o $6,680 millones, frente a $9,480 millones en 2010. En cierto modo, Read revertió el curso de la compañía con la inversión de $8,390 millones el año pasado en el descubrimiento de nuevos fármacos, pero volvió este año a gastar más de $7,000 millones en investigación.

Medicamentos contra el cáncer prometedores

Sin embargo, a pesar de los recortes, Pfizer tiene varios fármacos prometedores en marcha. Entre otros, Ibrance, aprobado recientemente por la FDA (la agencia de gestión de los alimentos y los medicamentos de Estados Unidos) para tratar el cáncer de mama. La compañía está esperando la aprobación para el tratamiento de otros tipos de cáncer, señala Jeffrey Loo, analista de valores del sector de salud en S&P CapitalIQ, lo que convierte a Ibrance en otro gran éxito de ventas. Loo espera ventas de alrededor de $1,800 millones el año que viene, pudiendo gastar $3,000 millones al año hasta 2020, si Pfizer obtiene la aprobación para utilizar el fármaco en otras formas de cáncer.

El cáncer, de hecho, sigue siendo una de las principales áreas de atención de Pfizer en el segmento de nuevos medicamentos después de todos los recortes realizados.

Sin embargo, John R. Kimberly, profesor de Gestión de Wharton, señala que el tratamiento del cáncer es un mercado competitivo. “El espacio de la oncología está demasiado saturado y lo estará aún más”, dice. “Existe un cierto potencial, pero no sabemos si está reservado para los medicamentos campeones de ventas en el sentido tradicional”.

Las dos compañías dijeron que juntos tienen más de 100 medicamentos en etapas intermedias y avanzadas de desarrollo. Además de los fármacos contra el cáncer, Pfizer ha trabajado para tratar enfermedades cardíacas, diabetes, dolor y Alzheimer, así como vacunas. Allergan está dedicado a la salud de la mujer, cosmética, dermatología y la atención oftalmológica. “Hay poca superposición en la línea de medicamentos en desarrollo de ambas compañías”, dijo Loo.

Allergan, que fue el resultado de numerosas fusiones y adquisiciones, dijo que llevaría más de una docena de nuevos medicamentos al mercado en los próximos años, incluyendo los nuevos tratamientos para la degeneración macular y la depresión. Damien Conover, analista de Morningstar, señala que los productos especiales de los mercados de la compañía tienen “barreras de entrada mucho más altas y menos riesgo genético que la mayoría de las drogas”.

Éxitos más modestos

Aunque no produjera ningún campeón de ventas, Divan dijo que las empresas necesitan tener algunos productos muy buenos que se puedan convertir en fuentes regulares de ingresos.

“El viejo modelo del éxito de ventas no puede ser el núcleo de la estrategia de las grandes empresas farmacéuticas de cara al futuro”, dijo. “Eso no quiere decir que no se puedan descubrir campeones de ventas. Significa, más bien, que si y cuando esto suceda, será un subproducto de un enfoque diferente”.

Loo dice que la era de “blockbkusters” también es reflejo de la estrategia de “un producto para todos los casos” que se adoptaba en relación con los medicamentos. “La industria de la droga se alejó de este modelo hacia un enfoque más personalizado”, dijo.

Cualquier beneficio para la línea de productos en desarrollo procedentes del acuerdo con Allergan primero tendrá que superar los desafíos que surgen de la combinación de las dos compañías, una tarea más difícil aún por el hecho de que ambos están todavía absorbiendo adquisiciones anteriores. Allergan es la quinta gran fusión de Pfizer en los últimos 15 años.

“La investigación sobre las fusiones, en general, tiene pocos resultados positivos”, dice Pauly, “por lo general debido a los problemas de la fusión de ‘culturas’ “de diferentes empresas”.

Kimberley dice que la historia de Pfizer, de tantas adquisiciones, significa que “hay que creer que la compañía ha desarrollado un know-how profundo de la integración de las culturas”.

Sin embargo, la experiencia de la compañía también apunta a los desafíos planteados por la integración.

“¿En qué momento la empresa llegará al límite de su capacidad de integración real?”, se pregunta Kimberley. “Cada adquisición tiene problemas específicos, problemas que rara vez se resuelven por completo. Cuánto del volumen de ‘cosas’ residuales sin resolver determinará, en última instancia, el rendimiento global de la empresa. Esa es la gran pregunta”.