Por redacción de Sin Comillas

El presidente de la Junta de Directores de la Asociación de Hoteles y Turismo de Puerto Rico (PRHTA, por sus siglas en inglés), Miguel Vega, denunció un alegado intento de algunos sectores del Senado para enmendar la Ley de Juegos de Azar en beneficio de los operadores  de tragamonedas ilegales, permitiéndoles la otorgación de premios en efectivo.

Este cambio de política pública dramático se intenta hacer sin la celebración de vistas públicas. “Esto es un ataque a espaldas de la industria de casinos en Puerto Rico y en evidente violación de la política pública del Gobernador. La industria de casinos genera cerca $264 millones anuales de los cuales se beneficia la Compañía de Turismo, la Universidad de Puerto Rico y el Departamento de Hacienda”, explicó Vega.

“Solicitamos al presidente del Senado, Thomas Rivera Schatz que se reconsideren estos cambios y le de la oportunidad a la industria de expresarse en vistas públicas para discutir abierta y transparentemente cómo se verían afectados los recaudos de los casinos que tan importantes para la economía del país”, dijo.

El intento de cambiar la política pública de juegos de azar se pretende lograr utilizando el P. de la C. 1142, cuyo propósito inicial era ajustar los costos en las licencias que actualmente deben pagar los operadores de las llamadas máquinas de entretenimiento para adultos, para colar sigilosamente el que puedan pagar premios en efectivo.

“Es una falta de respeto a nosotros como industria que ahora se venga con prisa a tratar de colar enmiendas para legalizar el que estas máquinas paguen premios, ya que fueron declaradas ilegales bajo la Ley de Ajustes al Sistema Contributivo (Ley Núm. 77 de 2014) y mucho menos sin evaluar a fondo el impacto en nuestra industria y sin tomar en cuenta que nunca se comparará lo que tributamos los casinos y los requisitos que debemos cumplir con estas máquinas ilegales”, acotó Vega. “Hacemos un llamado a que se le de la oportunidad a la industria de comparecer a vistas públicas, para entre otras cosas explicar el impacto que supone un cambio de tal magnitud y cómo se afectaría la recién creada Organización de Mercadeo del Destino, así como las estrategias para posicionar el turismo como puntal de desarrollo económico como ha propuesto el Gobernador. Estos cambios ponen en riesgo los mas de 80,000 empleos que tiene el sector en la Isla, agudizando la emigración a los Estados Unidos y disminuyendo los recaudos de Hacienda, porque no podemos perder de perspectiva que el turismo impacta a sobre 17 sectores de la economía”, enfatizó.

La Ley Núm. 77 de 2014 prohíbe expresamente la operación de máquinas de entretenimiento para adultos en el interior de establecimientos comerciales, tales como tiendas por departamentos, farmacias, panaderías, supermercados, gasolineras, megatiendas, cadenas de tiendas y/o restaurantes, hospitales, oficinas profesionales e instalaciones del gobierno. Los negocios que operen este tipo de máquinas no podrán estar localizados a menos de 200 pies lineales de distancia de escuelas, iglesias o congregaciones, a menos de 5 kilómetros de distancia de un hotel con casino, y las máquinas no pueden constituir la única fuente de ingreso de los negocios.

Del mismo modo, se informó el interés de los representantes de la industria en poder discutir en vistas públicas aspectos de lavado de dinero, el costo socio-económico del juego en las comunidades, la incertidumbre que se crea a los inversionistas que están contemplando invertir en Puerto Rico y el impacto que traería estos cambios en operaciones hoteleras con casinos en pueblos como Bayamón, San Juan, Rio Grande, Manatí, Ponce y Mayagüez.