NUEVA YORK (AP) — El huracán Sandy obligó a cancelar miles de vuelos del noreste de Estados Unidos el lunes y alteró planes de viaje en todo el mundo, varando a pasajeros desde Hong Kong hasta Europa.

La gigantesca tormenta amenaza con paralizar casi totalmente los recorridos aéreos durante al menos dos días en una región crucial para los vuelos nacionales e internacionales.

Grandes aerolíneas como American Airlines, JetBlue y Delta cancelaron todas sus llegadas y salidas a los tres aeropuertos del área de Nueva York, el espacio aéreo más transitado en la nación. De acuerdo con el servicio de rastreo FlightAware, casi 10.000 vuelos han sido cancelados para lunes y martes.

El número de cancelaciones ya superó a las que provocó el huracán Irene el año pasado y ahora está a la par con una tormenta invernal de 2011, cuando se cancelaron 14,000 vuelos en cuatro días.

Tanto el Aeropuerto Internacional de Filadelfia como el de Newark, un centro de operación de United Airlines, tuvieron más de 1.200 cancelaciones cada uno para los dos días. JetBlue Airways prevé anular 1,200 vuelos en total entre domingo y martes, Delta Air Lines 2,100 y American Airlines 1,000.

Los retrasos se extendieron por todo Estados Unidos, afectando a viajeros en ciudades como San Francisco y Chicago, así como en Europa y Asia, donde las aerolíneas cancelaron o demoraron vuelos a Nueva York y Washington desde ciudades tan importantes como Berlín, París, Tokio y Hong Kong.

Casi una tercera parte de los vuelos en Estados Unidos entran o salen de Nueva York todos los días, por eso las cancelaciones aquí impactan fuertemente en otras ciudades.

Los meteorólogos prevén que llegará a la costa del Atlántico el lunes por la noche, donde chocará con una tormenta invernal que proviene del oeste y con aire frío que baja del Ártico.

Los expertos dicen que la inusual tormenta híbrida que resulte de esa mezcla provocará el caos a lo largo de 1.280 kilómetros (800 millas) desde la costa este hasta los Grandes Lagos.