Por redacción de Sin Comillas

La junta de directores de Popular, Inc. (NASDAQ:BPOP) anuncio cambios en la estructura gerencial. Richard Carrión, que hasta ahora ocupaba los cargos de presidente de la junta de directores y principal oficial ejecutivo, ha sido nombrado presidente ejecutivo de la junta de directores (“Executive Chairman of the Board of Directors”). La intención es que en un periodo de tres años Carrión pase a ocupar una posición como presidente no ejecutivo de la Junta. Carrión aclara que no se trata de un retiro, sino de un cambio de funciones.

Ignacio Álvarez, hasta ahora presidente y principal oficial de operaciones desde 2014, se convierte, además, en principal oficial ejecutivo y miembro de la junta de directores. Ambos nombramientos serán efectivos el 1 de julio de 2017. Álvarez trabaja en el banco desde 2010.

En su nuevo rol, Carrión colaborará con Álvarez en temas de estrategia corporativa, con énfasis en fusiones y adquisiciones, innovación y tecnología, iniciativas de responsabilidad social, gobierno y relaciones con los clientes.

Carrión empezó a trabajar en Popular en 1976, se convirtió en presidente en 1985, en principal oficial ejecutivo en 1991 y en presidente de la junta de directores en 1993.

Álvarez dijo estar entusiasmado con las nuevas responsabilidades. “Soy una persona bastante pragmática. No va a haber cambios grandes en la estrategia. La estrategia seguirá siendo crecer en Estados Unidos y en Puerto Rico mantener la posición en los segmentos que somos líder y en los que no lo somos subir nuestra posición. La estrategia es usar la red de sucursales y la tecnología como una forma de llegar a los clientes de forma más eficiente”. Confía en que habrá oportunidades y estarán pendientes para poder aprovecharlas. “La economía va a cambiar. Los retos son grandes y a corto plazo seguramente va a haber contracción”.

En los próximos días se presentará el presupuesto y se verá si el Gobierno alcanza un acuerdo con los acreedores. Cuestionado sobre cómo se ve desde el mayor banco de la Isla el futuro inmediato, Carrión comentó que “hay dos elementos críticos de los que no tenemos ninguna información adicional”. Se refiere a la presentación del presupuesto y a las negociaciones. Se pregunta qué pasará si no se llega a un acuerdo antes de 2 de mayo. ¿Se pasará a un Título III o hay posibilidad de extender la negociación?

Sobre el presupuesto, señaló que “entendemos que asumiendo que hay unos recortes en gastos gubernamentales eso puede tener un impacto negativo en la economía”. Pero podría haber un contrapeso si se realizan inversiones.

Por ahora, Carrión confía en que el banco podrá hacer frente a la austeridad del presupuesto. “Hasta ahora, todo los indicadores de crédito muestran estabilidad o inclusive mejoría. Naturalmente si la economía empieza a dar señales de seguir decreciendo esto tiene algún impacto en la cartera de crédito”.

La entidad financiera presentó sus resultados para el primer trimestre del 2017, que incluyen un ingreso neto de $92.9 millones, que supone un aumento de 9.3% respecto al mismo periodo del año pasado. En el cuarto trimestre del 2016 había informado una pérdida de $4.1 millones.