La tasa de morosidad de los bancos se mantiene elevada, por encima del 13%, desde mediados del año pasado. En el primer trimestre subió a 13.54%, según datos del Federal Deposit Insurance Corporation (FDIC). Hace un año, la tasa estaba en 13.82%, un nivel récord. La tasa de morosidad apenas alcanzaba el 2% en el 2006, al comienzo de la crisis económica.

Sigue aumentando la morosidad en las carteras de hipotecas, que llega a 17.57%. La morosidad más alta se encuentra en la cartera de préstamos de construcción y desarrollo con niveles de 64.45%.

La tasa de morosidad más alta la tienen los bancos que participaron en la consolidación bancaria: Oriental (18.70%), Popular (16.10%) y Scotiabank (16.02%). Estas instituciones compraron la mayoría de los activos de los bancos intervenidos, en transacciones asistidas por el FDIC, que garantiza el 80% de las pérdidas en préstamos. Lo que significa que a pesar de tener altas tasas de morosidad, el banco sólo tiene que hacer frente al 20% de las pérdidas.

Santander y BBVA tienen los niveles de morosidad más bajos, 6.09% y 9.27%, respectivamente.

Las tasas de morosidad de los bancos (el porcentaje de préstamos atrasados del total de préstamos que mantienen en cartera) se han disparado, pasando de 1.62% en el 2006, a 2.67% en el 2007, 4.82% en el 2008, 9.29% en el 2009 y finalmente, 13.41% este año. El valor de los préstamos atrasados asciende a $7,011 millones, por debajo de los $8,330 millones del mismo período de 2010.

La tasa de morosidad más alta la encontramos en la cartera de préstamos de construcción y desarrollo, que se ha multiplicado por 10 cuando se compara con el 2007, alcanzando el 62.45%, aunque algunas instituciones llegan a tener más del 80% de su cartera con atrasos.

Los desarrolladores, con miles de viviendas sin vender, tienen muy serias dificultades para repagar sus créditos y algunos han optado por declararse en quiebra. Los préstamos de los desarrolladores con atrasos se ha reducido de $2,888 millones en el primer trimestre de 2010 a $955.8 millones en el primer trimestre de este año.

En las hipotecas, la tasa de morosidad está en 17.57%. La cifra ha vuelto a aumentar después de dos trimestres de descenso, tras alcanzar un nivel récord de 18.06% en el primer trimestre de 2010. Este crecimiento de los atrasos en los pagos de hipotecas ha obligado a las instituciones financieras a poner en marcha programas de mitigación para evitar que se disparen las ejecuciones de hipotecas.

Por instituciones financieras, los mayores problemas en las carteras hipotecarias están en Popular (22.40%), Oriental (20.65%) y Scotiabank (19.88%).

La tasa de morosidad en préstamos comerciales/real estate sube hasta 12.47% en el primer trimestre; y los préstamos comerciales e industriales tienen una tasa de 10.83%, un alza respecto al 8.29% del mismo período del año pasado.

La morosidad en las tarjetas de crédito también ha disminuido, de 3.67% el año pasado a 2.90%.

Los mayores problemas están en las  carteras de préstamos de construcción y desarrollo. La tasa de morosidad de estos préstamos se ha disparado hasta 62.45%, un nivel récord. Hace un año estaba en 53.79%.  Las tasas más altas las tiene Scotiabank (84.28%) y Oriental (80.46%). Oriental y Santander exhiben una tasas de morosidad más moderadas, 26.58% y 15.79%, respectivamente.